Una primavera setentista reúne todos los condimentos para una historia romántica en su sentido más amplio, desde el amor de dos jóvenes estudiantes a los ideales que poblaban las mentes de muchachos y muchachas de aquellos años; la música, la política, el sexo, el amor y la pasión de creer que el mundo podía ser un mejor lugar donde vivir.
Susana y Juan Emilio tenían 17 años y cursaban el último del secundario en
“Ella era de cabellos negros, tes blanca y ojos oscuros”, la describe en su e-mail enviado a radiohistoriasdeamor@gmail.com; Juan Emilio se transporta a treinta y cinco años atrás, a un fin de semana donde todo podía pasar, donde todo era posible.
“Comenzó en una estudiantina del año 1975 en Empedrado. Íbamos hasta
La pequeña localidad se convertía en esos dos días, sábado y domingo, entre el 21 y 23 de septiembre, en
También había algo de trasgresión, para muchas chicas y chicos era la primera vez que se alejaban de Corrientes, por ende de sus padres, por eso para ellos el mundo estaba al alcance de las manos. Y en muchos casos, el mundo estaba en sus manos, se sentían totalmente vivos, casi inmortales.
Juan Emilio continúa en la descripción de aquel fin de semana que fue un paréntesis en la vida adolescente: “Se hacia campamento por dos días generalmente y allí eran muy frecuentes las historias de amor entre estudiantes, algunas perduraron otras quizás no, pero lo lindo de aquella época es que esas historias hoy a veces las vemos hechas realidad”.
Sin embargo el caso de nuestro protagonista no fue así, la vida, la cruel y real vida le tenía preparada una curva muy cerrada, un giro que cambiaría para siempre la existencia de Juan Emilio y su enamorada, Susana.
Una vez abajo del ferrocarril que tras su parada en Empedrado y depositar a esa legión de adolescentes y sus exultantes hormonas, siguió camino a
Así, el fin de semana de estudiantina pasó colmado de música, vino, cerveza, puchos y para los menos pudientes, gaseosa con picadillo y galletitas. Los grupos nacionales que se destacaban en la época eran Zafari, Trocha Angosta,
De Corrientes Capital el grupo musical The Dandy Boys y también Los Rebeldes cuyo vocalista en aquella oportunidad es el hoy Fiscal General, Cesar Sotelo, testigos de aquellas veladas a orillas del río afirman que (cantaba muy bien).
Tras ese fin de semana épico, Juan Emilio había trabado una buena amistad con su cortejada Susana, claro que el quería mucho más que una amistad: “La invité a salir –dice- ella era algo muy especial para mi y así compartimos diversos encuentros y bailes en algunos boliches de aquella época porque quien suscribe fue DJ de KAKOSI (por Mendoza entre Bolívar y Belgrano)”, un boliche de moda en aquellos tiempos del ’75, “mientras ponía música Susanita me hacía compañía en la cabina”
Y así fue como ambos protagonistas de nuestra historia de amor setentista empezaron un noviazgo intenso, pero como todo lo bueno dura poco, la relación giraría bruscamente para tener un abrupto final.
“Fuimos novios desde los 17 hasta los 20 años. El final fue porque fui convocado a Mar del Plata a prestar Servicio Militar en una base de
A pesar de ese final mantiene un gran cariño por Susana, su amor adolescente de mediados de los ’70, ella se había portado como lo que es, una dama con todas las letras. “Ella me llamó para comentarme de su decisión que contraía enlace y ahí entendí, más el tiempo que transcurrió después, que fue mi primer Gran Amor”.